Chile aprueba nueva Ley de Adopción tras 12 años de espera: el foco está en los derechos de la infancia
El Congreso despachó la ley con amplio respaldo político. Se prioriza el interés superior de niños, niñas y adolescentes, reduciendo tiempos de espera y reconociendo el derecho a conocer sus orígenes.
Con apoyo transversal, el Congreso aprobó una nueva Ley de Adopción que reemplaza un sistema obsoleto y da un giro hacia un enfoque centrado en la niñez.
Tras más de una década de tramitación legislativa, el Congreso despachó la nueva Ley de Adopción, una reforma largamente esperada que redefine los principios del sistema adoptivo en Chile. La normativa pone en el centro el interés superior de niños, niñas y adolescentes, reconociendo su derecho a crecer en un entorno familiar estable y afectivo.
Estamos muy contentos, contentas, orgullosas de que se acabe de despachar la nueva ley de adopción en Chile. Teníamos una deuda tremenda con los niños, especialmente los más vulnerados”, declaró la ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro, quien destacó el valor del diálogo político que permitió este avance.
Principales cambios del nuevo marco legal
Entre las transformaciones más significativas se incluyen:
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Reducción de los plazos: Se fijan tiempos máximos de entre 12 y 18 meses para que los jueces decidan si corresponde la revinculación con la familia de origen o una adopción definitiva. Antes, los procesos podían extenderse hasta seis años.
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Fin de la prelación rígida: Ahora pueden postular en igualdad de condiciones matrimonios, personas solteras o parejas con acuerdo de unión civil, priorizando siempre el bienestar del niño o niña.
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Derecho a conocer los orígenes: Se reconoce legalmente el derecho de los niños adoptados a conocer su historia, e incluso se permite mantener vínculos post adoptivos con sus familias de origen, si así lo desean.
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Familias de acogida: Se abre la posibilidad para que familias que han acogido a un niño por largo tiempo puedan convertirse en adoptivas, en casos excepcionales.
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Combate a las adopciones ilegales: Se perfecciona la legislación para sancionar penalmente la obtención ilegal de un niño, niña o adolescente, respondiendo a casos históricos de adopciones irregulares.
“Los niños podrán ser escuchados y conocer sus raíces”
La subsecretaria de la Niñez, Verónica Silva, subrayó que el cambio más innovador es reconocer el derecho a ser oído durante el proceso, junto con el acceso a los orígenes. “Es completamente nuevo que un niño adoptado pueda tener una relación post adoptiva con su familia de origen”, afirmó, agregando que el nuevo marco legal también podría duplicar la cifra anual de adopciones, que hoy bordea las 250.
Por su parte, la ministra Secretaria General de la Presidencia, Macarena Lobos, valoró el acuerdo alcanzado:
“Cuando el diálogo es genuino y el foco está en niños, niñas y adolescentes, sí es posible llegar a acuerdos transversales. Esto es una señal clara de compromiso con la infancia”.
Con esta ley, el país actualiza su sistema de adopciones para alinearlo con los estándares de derechos humanos, tal como lo establece la Ley de Garantías de la Niñez y Adolescencia. Se trata de un paso decisivo hacia un modelo más humano, eficiente y centrado en el bienestar integral de la infancia chilena.
